¿Acaso las tendencias marquen decisiones?, el comportamiento de los usuarios se mueve por la ola de “contagio”, a la que posteriormente se puede indicar como tendencias. Para ser justos con las definiciones, las tendencias son un efecto, puede estar compuesto por un efecto de contagio, a los que algunos llaman influencers, para ambas situaciones generar un proyecto de posicionamiento en buscadores, es arriesgado, pero es una tendencia, valga la ironía, sin embargo la aplicación temporal de los términos, es importante.
Antes de la generación de estrategias de marketing, los datos con los que se cuenta es con tendencias, los influencers, es un fenómeno que genera esos datos, aunque no es el único método para conseguirlos, ni siquiera el más importante, y pronto mostrará sus resquebrajaduras, al menos desde el punto de vista de las empresas.
Convertir usuarios en clientes mediando un influencers no es una tarea sencilla, por una parte, los usuarios están entrenados para evitar la publicidad, salvo como parte del juego de ejecuciones del tema del influencer; el rechazo de los usuarios es un punto ciego que va alejando a las empresas de las redes sociales.
Sin embargo, en la delgada línea crece un factor distintivo, el factor UX, experiencia del usuario, donde hay una traducción entre la forma que se presenta la información o propuesta de una página web, y la aceptación por parte de los usuarios.
UX es una técnica que mide el percepción del usuario, y principalmente intenta medir la capacidad de concretar el horizonte de expectativas del usuario, luego, convertir eso en una acción de aprovechamiento para el sitio, en los objetivos, que pueden ser diversos: posicionamiento, venta, información, etc.
La experiencia del usuario ha dejado de ser una percepción de persona a persona, ahora está en manos de diversos sistemas, algunos, como el Hardware, como ejemplo, los diseños de Apple, han marcado una diferenciación, la relación física entre usuarios y diseños de ese producto ha marcado una línea de trabajo para el resto de las compañías de hardward, y es uno de los paradigmas en el factor UX; llevar esa experiencia a páginas web, no es poco desafío.
El objetivo claro es que el usuario encuentro en el sitio al que entró, sus expectativas cumplidas, definido así, parece un caso de adivinación; sin embargo es este punto en el que las bases de datos como Big Data y otros, vienen a completar el círculo, sin embargo, entrar a los métodos de investigación de bases de datos requiere de conocimientos, interacción con herramientas y también de creatividad, gestionar miles de millones de datos no es algo que se puede ejecutar en una máquina sin recursos para manejar volúmenes de datos, luego, está el tiempo en que se recaba esa información, por lo que se impone un muestreo.
Para dar cuenta de lo difícil que resulta a veces llegar a conclusiones interesantes para el posicionamiento de una empresa, asistimos a los intentos de las redes sociales importantes, como Facebook, con recursos y proactividad, con usuarios y datos, aún así, no consiguen satisfacer las necesidades de las grandes empresas. Por una parte porque el factor UX es un concepto evanescente, en la realidad de las redes sociales no es que ese factor no haya sido tenido en cuenta, pero se le suma años de entrenamiento de los usuarios en el uso de esa plataforma, pero en la realidad, al más mínimo cambio, ahora aplicada estrategias de UX, siguen sion conseguir que sirva a las empresas. A menor escala, los usuarios, no así las empresas, encuentran en esa herramienta una respuesta interesante, o por lo menos satisface sus expectativas a escala humana, pero en la escala masiva, el que interesa a las empresas, el factor UX tiene mucho por desarrollar.